13 de octubre de 2010

En Rojo

¿Que por qué semáforos en rojo?
Porque quiero que pares aquí, aunque sólo sea un segundo. No debes entenderlo como algo restrictivo, tómalo como una oportunidad nueva e inesperada que se abre ante ti.

Vas andando por la calle sin prisa alguna, quizás te diriges a algún destino concreto. El semáforo de ahí delante se acaba de poner en rojo. Seguro que piensas "Ya está, otra vez a esperar -.-" Bueno, puedes esperar que esa laarga cuenta atrás de más de un minuto llegue de una vez a cero, o puedes utilizarla para disfrutar viendo a la gente bajo las influencias del "efecto cordero" o "efecto rebaño", al acabar contagiada por la impaciencia -o quizás deseo suicida de atropellar un coche- de aquel intrépido saltarín con las manos en los bolsillos de su chaqueta de polipiel que nerviosamente se ha adelantado a a sincronización del aparato de leds que organiza el tráfico, averiguar en qué estará pensando la persona esperando al otro lado del paso de peatones, compartir ideas con quien te encuentres paseando en ese momento, para abrazar y besar a tu pareja o, incluso, por qué no, conocer al actor de reparto que se ha colocado a tu lado a la espera de la luz verde de la película "Tú vida" en la que tú eres el protagonista. ¿Quién sabe? ¡Igual esa persona deja de ser un personaje secundario de tu largometraje!

Esta es la finalidad de mis semáforos. Marcar un alto, aunque no obligatorio, en el curso de tu camino por la interweb pero no para que esperes en vano si no para ofrecerte al oportunidad de disfrutar de cosas que puede que antes no te hubieras planteado. Como por qué el hombrecito de rojo de los semáforos está quieto. Si rojo = prohibido y verde = permitido, ¿no significaría prohibido estar parado? ¿Qué me dices? ¿Te apetece pararte en mis semáforos?

Soy un novato en el mundo de los bloggers y ésta, como es de suponer, es la primera entrada que hago en mi vida. Sí es cierto que uno tiene una ligera idea por haber caído en picado de vez en cuando en éste, ese y aquel blog. Pero no hay que negar que encontrarse ante tamaño espacio en blanco puede dejarte sin palabras.
Ya que temo que esto me suceda, voy a dejar que el gran Ringo Starr hable por mi -aunque sólo sea esta vez- ;)



Actuar con naturalidad. Qué mejor que eso para darse a conocer, ¿verdad? ¿Por qué no hacerle caso? ;)

1 mentes se han parado:

Natalia dijo...

Cuando alguien comienza un nuevo blog me gusta comentar con un simple "¡bienvenido a la blogsfera!", pero contigo no puedo hacer solo eso (: Espero que disfrutes de este pequeño rinconcito y ya sabes, como tantas veces hemos hablado, que lo importante es que tú estés contento con él, aunque sabes que en mí tienes una lectora más que asegurada :D Poco más puedo decir, a parte de lo mucho mucho que me gusta el título de tu blog pero aun me gusta más pararme en esos semáforos contigo.